Garra de los dedos para el contacto directo con los alimentos, por ejemplo, cuando se transfieren productos a bandejas o para el control de calidad
El diseño delgado del dedo permite que los productos pequeños se coloquen cerca unos de otros, por ejemplo en una lonchera de sushi
Manipulación de productos orgánicos con formas y características desviadas, como patas de pollo o manzanas
Uso en logística para recoger pequeñas piezas en envases como redes o bolsas
Utilización en sistemas automatizados en los que se procesan diferentes productos