La labor de prevención ante las enfermedades infecciosas es la más importante si buscamos prevenir su propagación en una sociedad. Cada enfermedad presenta un cuadro de síntomas que la identifican. Si hay un síntoma por excelencia que identifica todas las enfermedades infecciosas es la fiebre.

Medir la temperatura de las personas que se desplazan por una instalación o infraestructura se presenta como una de las medidas más interesantes para frenar las enfermedades infecciosas. Tradicionalmente la temperatura se ha medido con termómetros corporales.

Estos sistemas clásicos presentan una serie de desventajas claras:

• Necesitan mucho tiempo, lo que puede generar colas y aglomeraciones que a largo plazo sean contraproducentes.
• Requieren contacto entre personas por lo que aumenta el riego de infecciones cruzadas.
• No funcionan de manera automática.
• No son capaces de almacenar y gestionar los datos que generan.

Utilizar un sistema automático de medición de la temperatura presenta evidentes ventajas como:

• Poder medir sin contacto para evitar infecciones cruzadas.
• Poder almacenar y analizar toda la información recogida.
• Obtener mediciones de varios individuos a la vez.
• Funcionar de forma continua y automática.

El sistema óptico-térmico de F.F. Videosistemas funciona con dos lentes que trabajan de forma conjunta: una de espectro visible y la otra de espectro térmico.

La lente de espectro térmico permite, a través de las técnicas de reconocimiento de personas más avanzadas, detectar con precisión dónde se encuentra cada individuo. Por su parte, la lente de espectro térmico determina la temperatura a la que se encuentra el individuo. La combinación perfecta para la detección de posibles contagiados.