En el sector del transporte y la logística, asegurar la capacidad de carga con precios justos es difícil debido a la falta de visibilidad entre los potenciales compradores y vendedores. Los cargadores tienen dificultades para identificar a los mejores proveedores y operadores en su entorno, mientras que los transportistas más pequeños a menudo carecen de los recursos para negociar condiciones razonables. Los grandes proveedores de logística a menudo se ven sobrecargados por multitud de solicitudes RFPs, y pierden el foco de las opciones realmente buenas, y los proveedores más pequeños tienen problemas para acceder a sus clientes ideales debido a la falta de recursos comerciales.